Los gastos generales son aquellos que corresponden al mantenimiento del edificio como es la portería o una calefacción central, y los individuales son aquellos servicios como el agua, electricidad, teléfono que cuentan con aparatos contadores.
La ley, en el artículo 20, establece que durante los tres primeros años contractuales los gastos generales solamente se aumentarán una vez al año y nunca en un porcentaje superior al doble de aquel en que aumente la renta de acuerdo con el IPC. Independientemente que los gastos generales hayan experimentado un aumento superior.
En el contrato si detallamos el coste de cada concepto el recibo de la renta sería el siguiente:
Renta: ………… 700,00€
Portería: ..…. 60,00€
El nuevo recibo con la actualización sería : (cálculo IPC del 1,5%)
Renta : .………. 710,50€ (IPC 1,5% = + 10,50€)
Portería: ……. 81,00 € (10,50€ + 10,50€= 21,00€) Aunque los gastos de portería ya representen 90€/mes